Cuando no solo de conocimientos de alto valor, de experiencias de contraste depende el éxito profesional, y el éxito en los negocios.

La inteligencia emocional, un nuevo valor añadido del capital humano.

Cuando como ser gregario que somos es imprescindible un alto coeficiente de inteligencia interpersonal, así aquello de toda la vida, la facilidad de poder ponerte en el lugar del otro. Y que hoy en día se llama EMPATÍA.

Cuando los momentos difíciles, las crisis, las dificultades se presentan cuando menos la esperas y es imprescindible un alto coeficiente de inteligencia intrapersonal, que aunque dispongas de un buen plan estratégico, unos objetivos muy claros y precisos, llega el imprevisto, el desastre, y te pones a prueba, y lo resistes de una manera equilibrada y digna, lo que se llamaba temple. Y que hoy en día se llama RESILIENCIA.

Y tú dices, sí, suena muy bien, pero ¿como activo a tope mi empatía y resiliencia?

Descubre tu modo de gestionar las emociones, las propias y las de los demás, es decir, aguantar la presión y saber gestionar las relaciones de una manera proactiva. Para ello, si todavía no lo has hecho, empieza a familiarizarte y formarte en inteligencia emocional.

Seguro, vas a notar un cambio en tu día a día, y cada vez estarás más cerca del éxito profesional.

 

Te recomiendo la lectura este post que aparece en la revista

       Harvard Business Review

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Y a cazar tus sueños en el mundo vertiginoso actual.